| | Amir Thaleb Life.com | a la gente negativa como parte lógica de este trabajo, si no, vas frito. Somos animales de costumbre, a todo nos acostumbramos, a las críticas, a las traiciones, a las ingratitudes. A todo nos acostumbramos, de todo nos reponemos, todo se supera. Es parte de la vida, unos laburamos y otros se ocupan de los que laburamos, por esto unos logran mucho y otros no tanto.
Muchas veces he escuchado: “Amir Thaleb está más allá del bien y del mal”, muchos interpretan con esto que todo me patina, al contrario, nada me patina en absoluto, solo que hoy miro las cosas desde otro lugar. Hace poco una persona que trabajó en mi escuela orquestó todo un plan de difamación en contra mía. Estas cosas duelen y mucho, pero se superan más rápido. Inmediatamente recordé una serie de ejemplos que había aprendido en terapia, recuerdo claramente que el terapeuta una vez me dijo: “Para los maestros, los alumnos son como los hijos, por eso uno les exige al máximo cuando pueden dar, porque los quiere ver triunfar, quiere lo mejor para ellos, como cualquier padre para sus hijos. Y los alumnos ven al maestro como un padre, por eso se rebelan y lo desafían”. Esto lo veo de la siguiente manera: un padre les da a todos sus hijos por igual, pero siempre hay uno que se siente desplazado y entonces reacciona con rebeldía, criticando y haciendo todo tipo de cosas |
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| En busca de mi propia humanidad | equivocadas para llamar su atención, ignorando que así solo logra mayor rechazo. Hay seres que dada su gran inmadurez reaccionan infantilmente hacia los demás, con berrinches de niño malcriado, pero si bien las cosas duelen, al entender este tipo de situaciones, no guardás rencor, no te ponés a la altura, y rezás para que pronto despabile en su vida para bien y provecho de sí mismo. A él le resta, a mí me suma, porque me sirve para medir cuánta gente fiel tengo a mi alrededor, lo fuerte y estable que está mi imagen y mi carrera frente a los demás, porque de esto también vivo. Es difícil guardarle rencor a quien se equivoca por ignorante, todo pasa, todo fluye... “Fush, fush”, dijo una rubia.
Todo este sentido de humanidad con la que aprendí a convivir, también me brindó la apertura para decidir llevar adelante este proyecto de mi vida en la Web. Quería realmente compartir mi experiencia de vida, porque la experiencia de vida de otros también me sirvió para entender, anhelar y motivarme. Porque también me interesa que me conozcan a mí por mí mismo y no por las cosas que cuentan desde la excesiva admiración o desde la envidia y el resentimiento. Todo esto es lo que soy, de esta manera me manejo, sin rodeos, directo, frontal, sin tapujos, porque así soy y porque no sé ser ni hacer de otra manera. | | |
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